Si ya ordenaste el placard y el lavadero y no te quedan más cosas por limpiar. Si recién ahora, y ya en cuartos de final, te atreviste a asomar la nariz por entre la congregación de seres que invaden tu hogar para disfrutar del partido, te damos más material para que puedas disfrutar sin problemas. Pero ojo, no abuses de tu suerte y ni te atrevas a querer demostrar tus saberes recién adquiridos durante los 90 minutos del partido. Tenes conocimientos, no un escudo contra objetos contundentes.
Hoy vamos a explicarte el famoso “tiro libre”. Ese que se menciona más
de una vez en cualquiera de los 2 tiempos del partido y que tiene la asombrosa capacidad de tornar violento cualquier encuentro.
El tiro libre consiste en una forma de reanudar el juego tras una falta. Pero según el tipo de falta, este será directo o indirecto. ¿Cómo te das cuenta cuál es cuál? Si un jugador se la pasa a su arquero con el pie y este toma la pelota con las manos, será tiro libre indirecto. Si en cambio el jugador le pega a otro del equipo contrario, el tiro libre será directo a modo de sanción.
Pero vamos por partes. En el tiro libre indirecto, y como ya te habrás dado cuenta, el arquero le pasa la pelota a un jugador de su mismo equipo. Y si accidentalmente en el pase hay un gol, no se computará como tal sino como un tiro de esquina del equipo contrario. Es decir, para que la jugada tenga validez la tienen que tocar dos jugadores. El árbitro cuando marca un tiro libre indirecto mantiene el brazo levantado hasta que dos jugadores tocan el balón.
Mientras, en el directo, se puede patear directamente al arco. Por ejemplo veamos una situación: el arquero del equipo a ser sancionado elegirá el número de jugadores que formarán la barrera que lo ayudará a evitar el gol (que si se tomará como tal). Dicha formación se colocará a 9.15 metros de la pelota y el jugador encargado de patear, no podrá volver a tocar la pelota hasta que otro jugador la haya pateado antes.
Ahora que ya conoces todo sobre esta popular falta, presta atención al partido y apenas la distingas, pegá el grito. Vas a asombrar a más de uno con tus comentarios. Y por sobre todo, vas a erradicarte de la servidumbre de snacks por el tiempo que dure el Mundial. ¡Hasta la próxima!
Hoy vamos a explicarte el famoso “tiro libre”. Ese que se menciona más
de una vez en cualquiera de los 2 tiempos del partido y que tiene la asombrosa capacidad de tornar violento cualquier encuentro.El tiro libre consiste en una forma de reanudar el juego tras una falta. Pero según el tipo de falta, este será directo o indirecto. ¿Cómo te das cuenta cuál es cuál? Si un jugador se la pasa a su arquero con el pie y este toma la pelota con las manos, será tiro libre indirecto. Si en cambio el jugador le pega a otro del equipo contrario, el tiro libre será directo a modo de sanción.
Pero vamos por partes. En el tiro libre indirecto, y como ya te habrás dado cuenta, el arquero le pasa la pelota a un jugador de su mismo equipo. Y si accidentalmente en el pase hay un gol, no se computará como tal sino como un tiro de esquina del equipo contrario. Es decir, para que la jugada tenga validez la tienen que tocar dos jugadores. El árbitro cuando marca un tiro libre indirecto mantiene el brazo levantado hasta que dos jugadores tocan el balón.
Mientras, en el directo, se puede patear directamente al arco. Por ejemplo veamos una situación: el arquero del equipo a ser sancionado elegirá el número de jugadores que formarán la barrera que lo ayudará a evitar el gol (que si se tomará como tal). Dicha formación se colocará a 9.15 metros de la pelota y el jugador encargado de patear, no podrá volver a tocar la pelota hasta que otro jugador la haya pateado antes.
Ahora que ya conoces todo sobre esta popular falta, presta atención al partido y apenas la distingas, pegá el grito. Vas a asombrar a más de uno con tus comentarios. Y por sobre todo, vas a erradicarte de la servidumbre de snacks por el tiempo que dure el Mundial. ¡Hasta la próxima!
Por: Lucia Cortez.
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