Todos queremos estar ahí. Es la fecha en que los integrantes de la patria futbolera quieren ver a Messi gambeteando a todos y dándole un pase a la red. Para gritar, emocionarse, y sentirse feliz al menos por un rato. Pero el Mundial Sudáfrica 2010 se vive día a día. No es sólo una pelota de fútbol. Es pasión, es comunicación, es negocio, también. Es identidad, compromiso, respeto y también violencia. Se vive en la calle pero también en los medios. Y mucho mas en las plataforma tecnológicas. La cátedra de Periodismo Deportivo de 4 año de la UAI Rosario te invita a participar, soñar a pensar juntos que significa un Mundial de Fútbol para nuestro país. El silbato acaba de sonar.

miércoles, 16 de junio de 2010

Sudáfrica se reserva el derecho de admisión


Varios barras bravas argentinos que según las autoridades migratorias sudafricanas planificaban actos violentos durante el Mundial fueron deportados a Argentina. Entre ellos están el líder de la barra de Rosario Central, Andrés "Pillín" Bracamonte; el de la barra de Independiente y tesorero de Hinchadas Unidas Argentinas (HUA), Pablo "Bebote" Álvarez; y Sergio Gustavo "Flay" Roldán, de San Martín de Tucumán.


La medida de la jurisdicción sudafricana fue destacable. Ya que los barras no van a apreciar el espectáculo que brinda todo el Mundial en sí. Pero es un papelón para la Argentina, ¿para qué llegar a una situación así? La justicia nacional, una vez más, actuó mal al no impedir que ellos salieran del país teniendo en cuenta el prontuario policial que poseen.


El exilio dejó en evidencia que lo que no hace ni la justicia argentina ni el Gobierno, lo tuvo que hacer la policía sudafricana. Otra vez, por negligencia de la política y la burocracia, los argentinos están la mira de todos. Esta falla saca a la luz la falta de controles migratorios, la complicidad del poder con los barras y el financiamiento encubierto para que estas personas viajaran a Sudáfrica.


En conclusión, no se debería permitir el ingreso de los barras bravas a ningún partido nacional ni internacional. Ya que ellos viven del club o de la selección nacional y no tienen camiseta. Mientras que los hinchas aman y se desviven por sus colores. En fin, es una cuestión de libre albedrío y está en uno pertenecer a una parcialidad o a otra. Pero todo tiene sus consecuencias.


Por: Rocío Pavón.

1 comentario:

  1. hola gente, muy bueno el blog esta completisimo.. ahora que leo lo de los barras les queria preguntar, es verdad que mandaron de vuelta a un argento que se afano un queso?? porque lo escuche por ahi jaja anda afilada la viveza criolla

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